A veces las cosas no salen como uno las planea o desea… y esta es una de ellas… ya sé que suele pasar, pero no por ello dejo se sentir mucha bronca…

Hace un par de años que mis viejos, nos vienen insistiendo en viajar como lo hicimos en el 2005 a Europa, se fue posponiendo, por la sequía, por el trabajo y por varias cosas más, pero en este 2010, tienen motivos más que importantes para festejar como lo son los 55 años de casados, por lo que resolvimos aceptar la invitación de ellos y llevarlos nuevamente al viejo continente.

Para mi marido y para mí, ausentarnos por muchos días de nuestro trabajo es muy problemático, pero pensamos que debíamos hacerlo, que no importaba el lugar de Europa al que viajáramos, sino el estar 30 días juntos a ellos, ya que tantas veces los dejo relegados por el trabajo.

La fecha de salida prevista fue el 22 de agosto, todo venía “normal”… mucho estrés por el laburo…. demasiada ansiedad por parte de mis viejos… fuimos hasta Bs.As. y ahí comenzó una pesadilla, ya que mi vieja tuvo un problema de salud que le impedía volar, estuvimos a punto de suspender el viaje 10 horas antes de partir…. luego se llegó a la conclusión que debíamos viajar los tres y llevamos a mi madre de regreso al pueblo.

Por lo que ahora estoy viajando…, pero nadie lo disfruta a pleno, porque ella está sóla en su casa e imagínense que no está muy “alegre”, por lo que cada vez que la llamo, termino angustiándome y pensando porque no suspendimos la salida… luego me consuelo diciéndome, que ella me pidió que no le haga perder este viaje a mi padre…

Este viaje no fue preparado con el entusiasmo de otros, ya que me asustaba la responsabilidad, porque estamos “viejitos” todos…. por lo que espero termine mejor que como empezó…